El Grupo de Exploración Moraig (GEM) continúa rompiendo límites en la investigación subacuática del Riu del Moraig, ubicado en El Poble Nou de Benitatxell. En una reciente expedición, este equipo de espeleobuceadores alcanzó la marca histórica de 3.060 metros desde la entrada de la cueva marina, incrementando notablemente la exploración anterior, que alcanzaba los 2.800 metros en 2023.
Este hito permitió descubrir 260 metros adicionales de galerías hasta ahora desconocidas, lo que eleva a casi seis kilómetros la extensión total explorada por el grupo desde el inicio de sus trabajos en 2013.
Condiciones ideales tras la sequía
La expedición ha resultado especialmente compleja debido a las condiciones necesarias para llevarla a cabo, como destacó Eliseo Belzunce, líder del equipo de buceadores. Según explicó, la expedición requería condiciones muy particulares: «Necesitamos que haya algo de corrientes y que la visibilidad sea buena», algo que según reconoce «no siempre es fácil». Tras un complicado año 2024 marcado por la escasez de agua en el acuífero, las circunstancias finalmente han favorecido esta exitosa inmersión.
La relevancia de este avance radica en haber alcanzado una posición estratégica bajo la montaña del Puig Llorença, donde la superficie terrestre es más delgada. Según Belzunce, este hecho será clave para futuras investigaciones: «Vamos a poder geolocalizar el punto en un futuro con sistemas de medición que geolocalizan la posición bajo el agua».
Esta última expedición ha incorporado también un importante enfoque científico, gracias a la colaboración del Instituto Cavanilles de Biodiversidad y Biología Evolutiva de la Universitat de València, encabezado por el investigador Ferrán Palero. Este grupo busca profundizar en el conocimiento sobre la fauna acuática subterránea característica de este ecosistema único, con la ayuda técnica del espeleobuceador Frank Brehier.
Ecosistema subterráneo único en el mundo
El Riu del Moraig, conocido también como Riu Blanc, presenta una combinación singular de aguas dulces y saladas, que le otorga características únicas a nivel mundial. La complejidad del entorno, formado por sumideros y galerías parcialmente inexploradas, exige un nivel excepcional de experiencia para los buceadores que se adentran en su interior.
Durante décadas, investigadores como José María Cortés o el alemán Bernhard Pack, quien perdió la vida durante una inmersión en 1992, realizaron expediciones que sentaron las bases para los avances actuales. Hoy, el GEM ha superado ampliamente aquellas primeras marcas históricas, consolidándose como el grupo más exitoso en la exploración de esta cavidad marina.
