El malestar de vecinos por las molestias que han ocasionado las últimas pruebas deportivas que han tenido a Benissa o Calp como escenario, la Costa Blanca Bike Race o la Vuelta Ciclista a la Comunitat Valenciana, se han colado en el debate político. Diversos ciudadanos han expresado su malestar en redes sociales por el paso por propiedades privadas sin autorización de los participantes en una de estas competiciones deportivas, así como los continuos cortes a la circulación de calles y carreteras que han supuesto ambas carreras. Unas molestias que el grupo municipal socialista de Benissa ha trasladado al último pleno, celebrado esta semana, en busca de una respuesta. Marina Renner, portavoz de la formación socialista, puso sobre la mesa las quejas de vecinos que vieron invadidas sus propiedades. Unas denuncias de las que también se hizo eco la concejala de Compromís, Mari Carme Ronda.
El concejal de Deportes, Adrián Cabrera, aseguró que la entidad organizadora, una empresa privada, es la responsable de solicitar los permisos pertinentes. Mientras que el Ayuntamiento de Benissa simplemente tiene una tarea de apoyo. El edil abrió la posibilidad a recabar las quejas de los vecinos afectados para tramitarlas frente a la empresa gestora de la prueba.
El alcalde, Arturo Poquet, agregó que, si se han producido daños o desperfectos, el ayuntamiento reclamará a la empresa que los arregle.