A finales de marzo, la fábrica Bimbo en El Verger cerrará sus puertas definitivamente, marcando un momento crucial para la localidad y sus trabajadores. Antes de este cierre, el viernes 22 de marzo, la producción en la fábrica cesará, permitiendo que los empleados se marchen con un permiso retribuido hasta la fecha de cierre.
José González, presidente del Comité de Empresa, ha explicado que tienen previsto llevar a cabo un acto de despedida planeado para compartir «un rato en compañía» y suavizar esta transición.
González incide sobre el duro viaje hasta este punto, señalando el impacto emocional del anuncio del cierre en enero de este año. Sin embargo, resalta que se ha conseguido «una salida digna para prácticamente el 100% de las personas» involucradas. El preacuerdo logrado, que luego fue ratificado por la asamblea de trabajadores, abarca traslados a otras plantas, planes de renta para mayores de 56 años, e indemnizaciones para quienes optaron por esta vía.
El consenso y la unidad entre los trabajadores durante este proceso fueron destacados por González como lo más valioso, subrayando un final «agridulce» pero con la convicción de que «nadie se queda desprotegido».
